El billete de diez bolivianos ostenta en su anverso un autorretrato del pintor Cecilio Guzmán de Rojas, quien nació en la ciudad de Potosí y es considerado iniciador de una corriente pictórica de marcada inclinación indigenista. Sus pinturas valoran de sobremanera las raíces de Bolivia, por ello pinta rostros y escenas Quechuas y Aymaras en paisajes altiplánicos. También sobresalió por su tenaz tarea en defensa del patrimonio artístico boliviano, la catalogación y la restauración de obras de arte. En el reverso se aprecia un paisaje de la ciudad de Cochabamba con el monumento de las Heroínas de la Coronilla en el frente.